Recientemente, una nueva normativa ha dictaminado que Disney permita a sus accionistas votar sobre si la compañía debe revelar cómo utiliza la inteligencia artificial (IA). La Comisión de Valores y Bolsa (SEC, por sus siglas en inglés) ha dado luz verde a una propuesta de los Fondos de Índice de Capital de la AFL-CIO, que busca la transparencia en las prácticas de IA de Disney.
Si se aprueba, la propuesta requeriría que Disney prepare un informe de transparencia que describa el uso de la IA en sus operaciones comerciales. El informe también debería indicar el papel de supervisión de la junta directiva en relación con el uso de la IA y compartir cualquier pauta ética a la que Disney se adhiera en relación con esta tecnología emergente.
Disney intentó excluir la propuesta, argumentando que el uso de la IA forma parte de las operaciones comerciales normales y no está sujeto a votación de los accionistas. Sin embargo, la SEC falló de manera diferente, lo que marca una decisión significativa en términos de gobernanza de la IA.
La AFL-CIO, una federación de sindicatos que incluye al WGA East, Actor’s Equity, Communications Workers of America y la American Federation of Musicians, propuso por primera vez esta medida en octubre. Aseguran que la posible deshumanización de la fuerza laboral estadounidense a través de la IA representa una amenaza para la economía del país y para la clase media en declive.
Además, los accionistas de Apple también tendrán la oportunidad de votar sobre una propuesta similar relacionada con el uso de la IA, siguiendo el fallo de la SEC sobre el tema.
Se espera que la votación en Disney atraiga una atención significativa, especialmente debido a la batalla de poder en curso entre la compañía y el inversor activista Nelson Peltz. El aumento del interés por parte de los inversores se puede atribuir al contexto más amplio en el que se está llevando a cabo la votación.
Normalmente, los inversores institucionales impulsan la votación de los accionistas en las reuniones anuales, mientras que los inversores minoristas tienden a tener una menor participación en las votaciones. Sin embargo, la situación actual que involucra la demanda de divulgación del uso de la IA es probable que motive a más inversores minoristas a participar en la votación.
Esta propuesta relacionada con la IA también marca un nuevo foco de atención para el activismo de los accionistas. En los últimos años, las propuestas de los accionistas han abordado comúnmente temas como la divulgación climática, la equidad racial, los gastos políticos y corporativos, y la remuneración de los ejecutivos. La consideración de tecnologías específicas representa una nueva frontera en este ámbito.
Las crecientes preocupaciones en torno a la IA en la industria del entretenimiento se han reforzado con las huelgas lideradas por el Writers Guild of America y SAG-AFTRA, que destacaron el impacto del uso de la IA.
En conclusión, la próxima votación en Disney representa un desarrollo significativo en la gobernanza de los accionistas, ya que requiere transparencia en cuanto al uso de la IA por parte de la compañía. Esta decisión es probable que genere más discusiones y acciones relacionadas con el uso de la IA en diversas industrias.
The source of the article is from the blog enp.gr