La tecnología deportiva siempre ha estado entrelazada con la investigación científica y los avances tecnológicos, desde los primeros días de los Juegos Olímpicos modernos. Mientras que el uso de la fotografía por Étienne-Jules Marey en la captura de la superioridad atlética data de los Juegos de París de 1900, la era actual está dominada por los avances en inteligencia artificial (IA).
En los Juegos Olímpicos actuales en la capital francesa, la IA ha dejado su huella con la introducción de AthleteGPT, un chatbot diseñado para proporcionar información a atletas, voluntarios y espectadores. La IA está haciendo avances significativos en tres áreas clave según un artículo reciente en Nature: apoyar a árbitros y jueces, mejorar el rendimiento de los atletas y enriquecer la experiencia de los espectadores.
Una de las aplicaciones más innovadoras de la IA está en el análisis directo de atletas para facilitar estrategias de entrenamiento más efectivas y personalizadas. Este es un ámbito donde la tecnología, en particular el análisis de video, juega un papel crucial en mejorar el rendimiento y prevenir lesiones.
Una empresa notable que opera en este campo es BBSoF (Beyond Biomechanics Sport on Field), una empresa derivada de la Universidad de Padua, que se centra en tecnología de prevención de lesiones que ha captado la atención de organizaciones deportivas como la Federación Italiana de Rugby.
A medida que la tecnología avanza, también está influenciando la identificación de talentos, donde los procesos de selección de atletas se basan cada vez más en datos. Este cambio plantea preocupaciones sobre posibles disparidades y el impacto en los aspectos humanos fundamentales del deporte, como el talento, la determinación y la resiliencia.
En medio de los rápidos avances en la tecnología deportiva impulsada por la IA, es crucial recordar que cualidades humanas como la empatía, la motivación y las relaciones son irremplazables en el mundo del deporte. En última instancia, si bien la IA sirve como una herramienta valiosa para mejorar el rendimiento, la esencia del espíritu deportivo y la toma de decisiones siempre permanecerán en manos de individuos, incluidos atletas y entrenadores.